domingo, 20 de noviembre de 2011

Estudio bíblico de daniel capitulo 4 : El Hombre Bestia



“Él aplasta el orgullo del hombre y hace por él lo que no puede hacer por si mismo”


Texto Clave: “y siete tiempos pasarán sobre ti, hasta que conozcas que el Altísimo tiene dominio en el reino de los hombres, y que lo da a quien él quiere” Daniel 4:26

Actividades: Lee Daniel Cap. 4 completamente


Preguntas y Respuestas

1.- ¿Qué cambios percibes en el rey en los primeros 3 versículos?

2.- ¿Qué sueño tuvo Nabucodonosor? (resuma)

3.- ¿A quién mando llamar primero y por qué?

4.- ¿Qué estima tenía Nabucodonosor de Daniel?

5.- ¿Qué dijo Daniel del Sueño? (céntrese en su consejo sobre el sueño al rey)

6.- ¿A que se refería el Sueño con 7 tiempos pasaran sobre él en la vision? (Daniel 4:16)

7.- Tomando en cuenta la pregunta cinco ¿qué objetivo buscaba Dios con Nabucodonosor y por qué?

8.- ¿Se cumplió el Sueño? ¿Cuándo? Imagine el momento y lea bien los versículos y deduzca porque en ese momento se cumplió la sentencia.

9.- Luego de cumplida la sentencia ¿qué paso?

10.- Según todo lo leído: ¿Qué pasó con la vida de Nabucodonosor?

Complementario: Nabucodonosor II (c. 630-562 a. C.) es probablemente el gobernante más conocido de la dinastía Caldea de Babilonia. Reinó entre el 605 a. C. y el 562 a. C.

Es famoso por la conquista de Judá y Jerusalén, y por su monumental actividad constructora en Babilonia, como los famosos Jardines colgantes de Babilonia, que según cuenta la leyenda fueron construidos para su esposa que sentía nostalgia por el ambiente montañoso primaveral donde creció.

Es tradicionalmente llamado "Nabucodonosor el Grande", pero la destrucción de templos en Jerusalén y la conquista de Judá le causaron una imagen malévola en las tradiciones judías y en la Biblia, al contrario de lo que sucede en el Irak contemporáneo, donde es glorificado como un líder histórico.

Nabucodonosor fue el hijo mayor y sucesor de Nabopolasar, quien liberó Babilonia de la dependencia de Asiria y dejó a Nínive en ruinas. Según Beroso (historiador), contrajo matrimonio con la hija Amuhia de Ciáxares rey de los medos, por lo que las dinastías de Medos y Babilonia se unieron, y mantuvo la paz con los Medos durante muchas décadas.

Necao II, rey de Egipto, obtuvo una victoria ante los Asirios en Megido. Esto aseguró a Egipto la posesión de provincias Fenicias del imperio asirio, incluyendo parte de Palestina. Las provincias restantes fueron divididas entre Babilonia y Media. Nabopolasar estaba decidido en reconquistar de Necao las provincias del oeste de Siria, y para este fin mandó a su hijo junto a un poderoso ejército en dirección al oeste. En la Batalla de Karkemish en el año 605 a. C., el ejército egipcio fue derrotado y Siria y Fenicia cayeron bajo el dominio de Babilonia. Nabopolasar murió el 15 de agosto del 605 a. C. y Nabucodonosor regresó a Babilonia para ascender al trono.

 Nabucodonosor  Captura Israel: Nabucodonosor llevó a cabo varias campañas sobre Siria y Judá. Un intento de invasión a Egipto en 601 a. C. tuvo algunos contratiempos, causados por diversas rebeliones en el área del Levante, incluyendo Judá. Nabucodonosor terminó con las rebeliones, capturando Jerusalén el 597 a. C., y llevando al rey Jeconías a Babilonia. Cuando el faraón Apries intentó nuevamente una invasión a Palestina, el 589 a. C., Judá y otros estados de la región se rebelaron. Un segundo asedio de Jerusalén ocurrió en 587/586 a. C., finalizando con la destrucción del templo y la ciudad, y la deportación de muchos ciudadanos a Babilonia. Estos hechos se describen en los libros bíblicos de Reyes, Jeremías y Crónicas. Después de la destrucción de Jerusalén, Nabucodonosor sostuvo un asedio sobre Tiro (585-572 a. C.), que terminó con un compromiso, donde la ciudad aceptaba la autoridad de Babilonia.



 Nabucodonosor  un rey diferente a sus vecinos: Tomando en cuenta sus inscripciones y el número de templos construidos o restaurados por él, se puede decir que fue un hombre muy devoto en “sus creencias religiosas”. Lo que se sabe de su historia lo muestra con una disposición humana, en llamativo contraste con la demostración de crueldad gratuita de la mayoría de los soberanos asirios.

Fue debido a esta moderación que Jerusalén fue perdonada repetidas veces, y finalmente destruida sólo cuando esto fue una necesidad política; los príncipes rebeldes obtuvieron perdón, y el mismo Sedecías, que por su desagrado contra el rey babilónico le era particularmente odioso, si se hubiese comportado con menos terquedad, hubiera recibido mayor indulgencia (Jeremías 38:17, 18); Nabucodonosor mostró mucha consideración a Jeremías, dejándolo libre de acompañar a los exiliados a Babilonia o de permanecer en Jerusalén, y nombrando a uno de los amigos del profeta, Godolías, como gobernador de Jerusalén; concedió también tal parte de libertad a los exiliados judíos que algunos ascendieron a una posición de prominencia en la Corte y Baruc pensó que era un deber exhortar a sus compañeros para que tuvieran el bienestar de Babilonia en el corazón y para que oraran por su rey. La tradición babilónica cuenta que al final de su vida, Nabucodonosor, inspirado desde las alturas, profetizó la ruina inminente del imperio Caldea (Berosus y Abydenus en Eusebio, Praep. Evang., 9.41). Nabucodonosor murió en Babilonia entre el segundo y sexto mes del año 43 de su reinado.

 Nabucodonosor el gran constructor: pareció sentirse más orgulloso por sus obras que por sus victorias en el campo de batalla. Durante el último siglo de la existencia de Nínive (s. VII a. C.), Babilonia estaba devastada, no sólo a manos de Senaquerib y Asurbanipal, sino también como resultado de rebeliones. Nabucodonosor, continuando con el trabajo de reconstrucción de su padre, tuvo como propósito convertir su capital en una de las maravillas del mundo. Antiguos templos fueron restaurados; nuevas edificaciones de increíble magnificencia fueron construidas en honor a los dioses del panteón babilónico (*Diodoro de Sicilia, 2.95; Herodoto, 1.183); para completar el palacio real comenzado por Nabopolasar, nada fue ahorrado, ni "madera de cedro, bronce, oro, plata, piedras preciosas y raras"; un pasaje subterráneo y un puente de piedra conectaban las dos partes de la ciudad separadas por el río Éufrates; la ciudad se volvió inexpugnable con la construcción de un triple muro. Las labores de Nabucodonosor no estaban sólo ligadas a la capital; es acreditado por la restauración del lago de Sippar, abrir un puerto en el Golfo Pérsico, y la construcción de una muralla entre los ríos Tigris y Éufrates para proteger al país de invasiones del norte: de hecho, no hay un lugar en Babilonia donde no aparezca su nombre o vestigios de su actividad como rey. Estas gigantescas obras necesitaron una amplia mano de obra: de la inscripción en el templo de Marduk, se puede inferir que la mayoría de los cautivos traídos desde el oeste de Asia participaron en las labores de construcción.

 Nabucodonosor el rey humillado: Mientras presumía sobre sus logros, Nabucodonosor es humillado por Yahvé. El rey pierde la cordura y vive en la selva como un animal durante siete años (algunos lo consideran como un ataque de locura llamado zoantropía clínica). Después de esto, su cordura y postura son recobradas. Ni la enfermedad, ni el interregno que debió haber causado, están registrados en los anales babilónicos; sin embargo, hay una ausencia de actos del rey durante 582-575 a. C. Podemos deducir así que los cronólogos contemporáneos solo escribían los hechos que no contribuían en la grandeza de un Reino, los que no hacían esto eran borrados. Quizás fueran mandados a borrar por  El Rey Belsasar.


Aprendamos a estudiar la Biblia:

Uno de los pasos importante del lector es aprender cómo estudiar la Biblia; sobre todo cuando vamos a tratar temas importantes tales como las profecías ya que no entender una profecía correctamente puede causar todo un error de interpretación sucesivo como un choque múltiple en una carretera. Este capítulo es un claro ejemplo de ello.

Debemos entender que un capítulo debe entenderse en su contexto inmediato si esto está claramente demarcado por el mismo capítulo , si no sale expresado en el Capítulo deberemos entenderlo al contexto del libro al cual pertenece,  y si no existen datos en el libro al cual pertenece el capítulo recién buscaremos entenderlo a la luz de otras porciones de la biblia si es que si ninguna de las anteriores nos a entregado luz al respecto. Esto lo haremos sobre todo en las cronologías y profecías.(Método contextual).

En los casos de verdades doctrinales y principios bíblicos además del método citado anteriormente usaremos el sentido de atrás para adelante (Historico). Es decir comenzaremos desde el primer versiculo donde se menciona el asunto a aprender (doctrina, principio, conocimiento, leyes) desde ahí veremos desde atrás para adelante hasta terminar la biblia como comprendieron el asunto a investigar los patriarcas, los profetas, los reyes, jesús y los apóstoles. Así podemos encontrar los principios y aplicaciones de los mismos a través del tiempo y nos ayudará a entender el pensamiento de Dios. (Método Histórico Bíblico o mejor dicho el método correcto de entender las escrituras.)

El primero nos ayuda a establecer los contextos tácitos dentro del libro. El segundo nos entrega la COSMOVISIÓN BIBLICA del mismo. Luego con ambos podremos sacar el verdadero significado. El método contextual nunca se contrapone al método histórico si realmente comprendemos el verdadero contexto.

Si ponemos atención, aunque encontramos símbolos en este sueño, Daniel dio el contexto inmediato para entender este capítulo (Daniel 4:22). El ARBOL DE DANIEL no es más que otro que Nabucodonosor. No existe otra interpretación!. Daniel como Santo de Dios dio la correcta interpretación al sueño. Por tanto todo el contexto de la sentencia al árbol serían calamidades a suceder al Rey Nabucodonosor.

El siguiente punto a rescatar es la expresión Siete Tiempos; mucho se ha especulado sobre estos siete tiempos debido a que no se entiende que el Árbol es Nabucodonosor, No se respeta lo que Daniel dice en el libro, el árbol es una persona, el árbol es Nabucodonosor. Para comprender esto profundicemos un poco el tema: Árbol es una expresión usada en otras partes de la biblia para personas consideradas justas frente a Dios (Salmo 92:12-13, Romanos 6:5, Isaias 61:3), Por tanto Dios estaba considerando como obra de sus manos, como hijo, a Nabucodonosor (recordando que la profecía que dice que Dios levantaría a los Babilonios para castigar a Israel), de esta manera la Biblia nos explica que era el tiempo de la misericordia para Babilonia donde su rey era considerado un ÁRBOL frente a Dios. Sin embargo las sentencias caerían a este árbol por ser orgulloso.

Caerían 7 tiempos o como los traductores comprenden 7 años. ¿Siete años? sí, en innumerables  pasajes de la Biblia se nombra la expresión tiempo como 1 año (Daniel 12:7, Apocalipsis 12:14). Ustedes lo pueden confirmar buscando la palabra: `iddan  (hebreo) en algún diccionario Bíblico y verán su significado. También muchas versiones de la biblia vienen de antemano traducidas como Años para su correcta comprensión.

Un punto lapidario en cuanto a la compresión del libro de Daniel 4 sería el contexto del propio capítulo ya que nos informa que estos 7 años literales fueron perfectamente cumplidos (Daniel 4:34) en la persona de Nabucodonosor. Siendo restaurado y aun El transformándose en un creyente del Dios vivo.

Otras interpretaciones serían salir del contexto Bíblico y por tanto estarían erradas puesto que el Texto así como Daniel 2 se explica así mismo.

Para meditar:

 Aunque exaltado hasta el pináculo de los honores mundanales y reconocido por la Inspiración misma como "rey de reyes" (Eze. 26: 7), Nabucodonosor había atribuido a veces la gloria de su reino y el esplendor de su reinado al favor de Jehová. Fue lo que sucedió después del sueño de la gran imagen. Su espíritu sintió la profunda influencia de esa visión y del pensamiento de que el Imperio Babilónico, por universal que fuera, iba a caer finalmente y otros reinos ejercerían el dominio, hasta que al fin todas las potencias terrenales cedieran su lugar a un reino establecido por el Dios del cielo para nunca ser destruido.

Más tarde, Nabucodonosor perdió de vista el noble concepto que tenía del propósito de Dios concerniente a las naciones. Sin embargo, cuando su espíritu orgulloso fue humillado ante la multitud en la llanura de Dura, reconoció una vez más que el reino de Dios es "sempiterno, y su señorío hasta generación y generación."

  A pesar de ser idólatra por nacimiento y educación, y de hallarse a la cabeza de un pueblo idólatra, tenía un sentido innato de la justicia y de lo recto, y Dios podía usarle como instrumento para castigar a los rebeldes y para cumplir el propósito divino. Con la ayuda de "los fuertes de las gentes" (Eze. 28: 7), le fue dado a Nabucodonosor, después de años de pacientes y cansadores esfuerzos, conquistar Tiro; Egipto también cayó presa de sus ejércitos victoriosos; y mientras añadía una nación tras otra al reino babilónico, aumentaba su fama como el mayor gobernante de la época.

No es sorprendente que en su prosperidad un monarca tan ambicioso y orgulloso, se sintiera tentado a desviarse de la senda de la humildad, la única que lleva a la verdadera grandeza. Durante los intervalos entre sus guerras de conquista, pensó mucho en el fortalecimiento y embellecimiento de su capital, hasta que al fin la ciudad de Babilonia vino a ser la gloria principal de su reino, "la ciudad codiciosa del oro," "que era alabada por toda la tierra." Su pasión como constructor, y su señalado éxito al hacer de Babilonia una de las maravillas del mundo, halagaron su orgullo al punto de poner en grave peligro sus realizaciones como sabio gobernante a quien Dios pudiera continuar usando como instrumento para la ejecución del propósito divino.

 En su misericordia, Dios dio al rey otro sueño, para advertirle del riesgo que corría y del lazo que se le tendía para arruinarlo. Y de esta manera ninguno de sus sabios pudo dar interpretación y solo le quedo la alternativa de llamar a Daniel de quien tenía testimonio que Dios le revelaba los misterios.  Daniel Interpreto y rogó al orgulloso monarca que se arrepintiese y se volviese a Dios, para que haciendo el bien evitase la calamidad que le amenazaba.

Por un tiempo la impresión que habían hecho la amonestación y el consejo del profeta fue profunda en el ánimo de Nabucodonosor; pero el corazón que no ha sido transformado por la gracia de Dios no tarda en perder las impresiones del  Espíritu Santo. La complacencia propia y la ambición no habían sido desarraigadas todavía del corazón del rey, y más tarde volvieron a aparecer. A pesar de las instrucciones que le fueron dadas tan misericordiosamente, y a pesar de las advertencias que representaban las cosas que le habían sucedido antes, Nabucodonosor volvió a dejarse dominar por un espíritu de celos contra los reinos que iban a seguir. Su gobierno, que hasta entonces había sido en buena medida justo y misericordioso, se volvió opresivo. Endureciendo su corazón, usó los talentos que Dios le había dado para glorificarse a sí mismo, y para ensalzarse sobre el Dios que le había dado la vida y el poder.

El juicio de Dios se demoró durante meses; pero en vez de ser inducido al arrepentimiento por esta paciencia divina, el rey alentó su orgullo hasta perder confianza en la interpretación del sueño, y burlarse de sus temores anteriores, mientras Nabucodonosor andaba en su palacio y pensaba con orgullo en su poder como gobernante y en sus éxitos como constructor, exclamó: "¿No es ésta la gran Babilonia, que yo edifiqué para casa del reino, con la fuerza de mi poder, y para gloria de mi grandeza?”. Estando aún en los labios del rey la jactanciosa pregunta, una voz del cielo anunció que había llegado el tiempo señalado por Dios para el castigo.

Durante siete años, Nabucodonosor fue el asombro de todos sus súbditos; durante siete años fue humillado delante de todo el mundo. Al cabo de ese tiempo, la razón le fue devuelta, y mirando con humildad hacia el Dios del cielo, reconoció en su castigo la intervención de la mano divina. En una proclamación pública, confesó su culpa, y la gran misericordia de Dios al devolverle la razón.

El que fuera una vez un orgulloso monarca había llegado a ser humilde hijo de Dios; el gobernante tiránico e intolerante, era un rey sabio y compasivo. El que había desafiado al Dios del cielo y blasfemado contra él, reconocía ahora el poder del Altísimo, y procuraba fervorosamente promover el temor de Jehová y la felicidad de sus súbditos. Bajo la reprensión de Aquel que es Rey de reyes y Señor de señores, Nabucodonosor había aprendido por fin la lección que necesitan aprender todos los gobernantes, a saber que la verdadera grandeza consiste en ser verdaderamente buenos.

Actividad final: Lee Mateo 19:24-26; de esta manera uno de los paganos más grandes del mundo llegó a ser hecho hijo de Dios. Lee Juan 3:1-17 Esta transformación (nuevo nacimiento) es un milagro de Dios donde él “aplasta el orgullo del hombre y hace por él lo que no puede hacer por sí mismo”. ¿Y tú necesitas aprender cómo Nabucodonosor?

4 comentarios:

  1. SIMPLEMENTE DE BENDICIÓN ESTE ESCRITO Y ESTUDIO!!!!.... DIOS BENDIGA TU TIEMPO Y PROFUNDIDAD EN LA MISMA, SALUDOS DESDE VENEZUELA...♥ BENDICIONDX DESDE VENEZUELA

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  2. Esperamos seguir avanzando... puedes suscribirte a nuestro Blog y tambien seguir nuestros otros proyectos como KolorionStudio

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  3. el corazón del hombre es engañoso

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  4. Si cierto de la verdad el siglo babilónico es malvado.

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